El centro histórico de Maastricht se asienta en la orilla oeste del Maas, conectado con la orilla este a través del puente Sint Servaas. Al otro lado del puente surgió el arrabal de Wick, cuya importancia se vio incrementada por la estación del ferrocarril y algunas industrias, entre las que destacaba, por su importancia y su extensión, la fábrica de cerámica (Sphinx Ceramique). El traslado de ésta industria y la reconversión de los terrenos que ocupaba en una nueva zona residencial hace aconsejable la construcción de un puente -pasarela, para peatones y ciclistas, que ligue más directamente esta zona con la ciudad histórica que continúa siendo el centro comercial y universitario.

Lo que aquí se presenta es la última variante de un proceso que se inició en 1.992, y que aún deberá prolongarse por más tiempo hasta que la ciudad tome una decisión definitiva.

El intenso tráfico fluvial obliga a dejar una anchura libre entre soportes de 130 m., y un gálibo libre de 10 m. Desde el punto de vista del proyecto, este elevado gálibo hace deseable la colocación del tablero del puente en la parte inferior del tablero estructural, a fin de reducir dentro de lo posible la diferencia entre el nivel de tránsito y los puntos de acceso a éste.

Ante ésta situación se ha optado por proponer un sistema estructural basado en una viga cajón, que permite circular por su interior en el nivel más bajo del conjunto estructural, y que, al dotarlo de una cubierta, mejora las condiciones de un puente que ha de ser usado por peatones y ciclistas.

El puente aparece como una viga de sección constante, si bien, estructuralmente se trata de una viga de canto variable, simple en la zona central del vano, y doble en la proximidad de los soportes. La zona central, al estar suspendido el tablero de la estructura superior, recompone la altura total de la viga y permite incrementar la transparencia del puente.

Frente a otros sistemas posibles basados en suspender el tablero de una estructura sobreelevada, con la consiguiente aparición de mástiles y cables, el sistema estructural propuesto proporciona una neutralidad formal que permite que la nueva pieza se inscriba con naturalidad y discreción en su entorno.